RUNCIMAN, STEVEN
Romántica aventura cristiana o última invasión de los bárbaros, movimiento animado por razones religiosas o saqueo guiado por la ambición y la codicia, la historia de las cruzadas constituye un acontecimiento decisivo en la Edad Media. Antes de su inicio -en el siglo XI- los grandes centros de la civilización eran Bizancio y los países del Califato árabe; antes de su conclusión -en el siglo XIV- la hegemonía de la cultura y del poder se había desplazado ya hacia Occidente.
Para comprender ese lento pero irresistible movimiento de deriva no basta con estudiar las circunstancias que dan cuenta de su génesis en Europa; es preciso también explicar las condiciones que en Oriente posibilitaron el avance de los cruzados. La mirada debe abarcar desde el Atlántico hasta Mongolia, y el espectador ha de situarse en la perspectiva tanto de los francos como de los árabes y los cristianos de Oriente. Los tres volúmenes de la obra original están ahora reunidos en uno solo con tres partes: «La primera Cruzada y la fundación del Reino de Jerusalén», «El Reino de Jerusalén y el Oriente Franco» y «El Reino de Acre y las últimas Cruzadas». Estos textos constituyen la mejor ilustración de las vastas posibilidades de una historiografía que se niega a permanecer encerrada dentro de las fronteras de la erudición alejandrina y la parcialización de las especialidades y considera su principal deber «registrar en una extensa sucesión los hechos y movimientos más importantes que han dominado, con su vaivén, los destinos del ser humano».