DIDION, JOAN
"«Escribo estrictamente para averiguar qué estoy pensando, qué estoy mirando, qué veo y qué significa». En noviembre de 1999, Joan Didion empezó a visitar a un psiquiatra porque, como escribió a un amigo, su familia había estado pasando «unos años difíciles». Durante meses, registró sus encuentros con meticuloso detalle en un diario destinado a su marido, John Gregory Dunne.Las sesiones iniciales se centraron en el alcoholismo, la adopción, la depresión, la ansiedad, la culpa y las desgarradoras complejidades de la relación con su hija Quintana. Estos asuntos mutaron hasta abarcar su trabajo, que le resultaba difícil mantener durante períodos prolongados. Hubo discusiones sobre su propia infancia malentendidos y falta de comunicación con su madre y su padre, así como la temprana tendencia de la joven Joan a anticipar catástrofes y la cuestión del legado, o, como ella lo expresaba, «lo que ha valido».El diario de Didion fue elaborado con la precisión, la lucidez y la elegancia que caracterizan a la autora. Sin embargo, aquí apa"